Recuerdo perfectamente su voz.
Recuerdo los movimientos que realizaba cuando nos enseñaba a hacer flores con porcelana.
Recuerdo los ultimos dias que la ví.
Recuerdo el ultimo y horrible dia que la ví, por desgracia por ultima vez.
Recuerdo uno de los peores momentos de mi vida, en el que me dijeron que habias desaparecido de mi lado, que ya no te volveria a ver, que con todo lo que te quería no pude retenerte en este mundo.
Pero también recuerdo que no desapareciste, que estas conmigo siempre, en cada momento del dia, en cada luna que veo en la oscura noche, en cada lágrima que corre por mi mejilla al recordarte.
Y lo que más me duele, es que la gente que estuvo más cerca de ti, parece que se confunde, confunde mis sentimientos, estoy segura.
He llegado a preguntarme si en verdad tenía razón, pero por más que lo pienso me resulta imposible pensar que no te quiero, que no te he querido, o que no te querré. Es imposible.
Y para que quede bien claro, te echo de menos, te recuerdo en cada pequeña luz que veo en mi vida. Porque tu por ti misma eras luz, tu eras el arbitro en muchas peleas, tu eras la que enseñaba a todos, hasta a los más mayores, tu y solo tu eres alguien a la que nunca, y repito, nunca jamás olvidaré.